International organizations express our profound rejection of the recent criminalization actions of the Guatemalan Public Prosecutor's Office against the political opposition, academics, journalists and human rights defenders, in the so-called case "Takeover of the USAC: political booty".
This new abuse of power by the Public Prosecutor's Office takes place in a context of persistent judicialization of the electoral process, whose ultimate objective is to prevent President-elect Bernardo Arévalo, Vice President-elect Karin Herrera, and elected deputies from taking office on January 14, 2024. The interference of the Public Prosecutor's Office once again undermines the rule of law and democracy in Guatemala, improperly applying criminal law to legitimate actions in defense of university autonomy.
On November 16, raids and arrest warrants were registered against 27 people linked to social movements, students, civil society and the political party Movimiento Semilla in a case related to peaceful resistance at the University of San Carlos de Guatemala (USAC), in the face of the anomalies that occurred in 2022 in the process of electing university authorities. All these people are now being criminalized for their role in denouncing corruption in the election process and for peacefully defending their rights of expression, association and demonstration.
Among those with arrest warrants are former human rights ombudsman Jordán Rodas Andrade, human rights defenders such as Ramón Cadena and Helmer Velásquez, USAC academics such as Hada Alvarado and Eduardo Velásquez, student leaders and journalists. At the moment, 5 people have been apprehended: the former candidate for deputy for Semilla Marcela Blanco, Rodolfo Chang Shuma, Eduardo Antonio Velásquez Carrera, Javier De León and Alfredo Enrique Beber.
The Public Prosecutor's Office reported that in the next few hours they will present requests for pre-trial proceedings against the elected binomial of Arévalo and Herrera, against the deputies elected by the Seed Movement party Samuel Pérez, Román Castellanos, Raúl Barrera and against the deputies Aldo Dávila, Adán Pérez and Carlos Taracena; the above for having been at the USAC facilities making demonstrations at a press conference.
The Public Prosecutor's Office is thus deepening its strategy of criminalization focused years ago against justice operators, journalists, and other human rights defenders. The abusive actions of the Public Prosecutor's Office have been recognized internationally on more than five occasions by the Permanent Council of the Organization of American States (OAS). The OAS Permanent Council approved a resolution on November 15, 2023, expressing grave concern regarding the excessive judicialization of the electoral process and intimidation against members of the Movimiento Semilla party and their families, and resolved to "denounce the attempts of the Attorney General's Office to discredit and prevent a peaceful transition of power, which undermine the democratic process and Guatemala's commitments under the Inter-American Democratic Charter."
For its part, the Inter-American Commission on Human Rights (IACHR) has called on the State of Guatemala "to respect the result of the general elections and to cease the actions of the Public Prosecutor's Office (MP) that put at risk the constitutional order and the independence of the public powers." In this regard, we call on the IACHR to urgently assess the precautionary measures requested in the framework of the peaceful process for the defense of the autonomy of the USAC (MC-638-23) to avoid irreparable harm to these people.
Guatemala is going through critical moments where greater international oversight is required and express pronouncements to the authorities that Guatemala will not be accepted within the concert of nations if it continues in an authoritarian logic manipulating the laws to circumvent the results of the elections.
Download the full letter here.
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Organizaciones internacionales expresamos nuestro profundo rechazo a las recientes acciones de criminalización del Ministerio Público de Guatemala contra la oposición política, académicos, periodistas y personas defensoras de derechos humanos, en el llamado caso “Toma de la USAC: botín político”.
Este nuevo abuso de poder por parte del Ministerio Público se da en un contexto de persistente judicialización del proceso electoral, cuyo objetivo final es impedir que el presidente electo Bernardo Arévalo, la vicepresidenta electa Karin Herrera, y diputados electos tomen efectiva posesión de sus cargos el 14 de enero de 2024. La interferencia del Ministerio Público atenta una vez más contra el Estado de derecho y la democracia en Guatemala, aplicando indebidamente el derecho penal a acciones legítimas de defensa de la autonomía universitaria.
El 16 de noviembre se registraron allanamientos y órdenes de captura contra 27 personas vinculadas a los movimientos sociales, estudiantiles, la sociedad civil y al partido político Movimiento Semilla en un caso relacionado con la resistencia pacífica en la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), ante las anomalías que se dieron en el año 2022 en el proceso de elección de las autoridades universitarias. Todas estas personas hoy están siendo criminalizadas por su rol de denuncia de la corrupción en dicho proceso de elección y por ejercer pacíficamente la defensa de sus derechos de expresión, asociación y manifestación.
Entre las personas con órdenes de captura se encuentran el ex procurador de los derechos humanos Jordán Rodas Andrade, defensores de derechos humanos como Ramón Cadena y Helmer Velásquez, académicos de la USAC como Hada Alvarado y Eduardo Velásquez, líderes estudiantiles y periodistas. Al momento han sido aprehendidas 5 personas: la excandidata a diputada por Semilla Marcela Blanco, Rodolfo Chang Shuma, Eduardo Antonio Velásquez Carrera, Javier De León y Alfredo Enrique Beber.
El Ministerio Público informó que en las próximas horas presentarán solicitudes de antejuicio contra el binomio electo de Arévalo y Herrera, contra los diputados electos por el partido Movimiento Semilla Samuel Pérez, Román Castellanos, Raúl Barrera y contra los diputados Aldo Dávila, Adán Pérez y Carlos Taracena; lo anterior por haber estado en las instalaciones de la USAC haciendo manifestaciones en conferencia de prensa.
El Ministerio Público profundiza así su estrategia de criminalización enfocada hace años contra operadores de justicia, periodistas, y otras personas defensoras de derechos humanos. La actuación abusiva del Ministerio Público ha sido reconocida a nivel internacional en más de cinco ocasiones por el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA). El Consejo Permanente de la OEA aprobó una resolución el 15 de noviembre de 2023 expresando su grave preocupación respecto a la excesiva judicialización del proceso electoral e intimidación contra miembros del partido Movimiento Semilla y sus familias y resolvió “denunciar los intentos del Ministerio Público de desacreditar e impedir una transición pacífica del poder, que atentan contra el proceso democrático y los compromisos de Guatemala en virtud de la Carta Democrática Interamericana”.
Por su parte, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha hecho llamados al Estado de Guatemala “a respetar el resultado de las elecciones generales y a cesar las acciones del Ministerio Público (MP) que ponen en riesgo el orden constitucional y la independencia de los poderes públicos”. En este sentido, hacemos un llamado a la CIDH a valorar de forma urgente las medidas cautelares solicitadas en el marco del proceso pacífico de defensa de la autonomía de la USAC (MC-638-23) para evitar daños irreparables a estas personas.
Guatemala vive momentos críticos donde se requiere de mayor veeduría internacional y pronunciamientos expresos hacia las autoridades de que Guatemala no será aceptada dentro del concierto de naciones si continúa en una lógica autoritaria manipulando las leyes para burlar los resultados de las elecciones.
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